Este 18 de marzo de 2025, se anunció la Fase 1 de Contingencia Ambiental en la Ciudad de México y la Zona Metropolitana del Valle de México debido a la elevada concentración de ozono en la atmósfera. En la estación de monitoreo Gustavo A. Madero, los niveles alcanzaron 155 partes por billón (ppb), lo que llevó a las autoridades a establecer medidas para proteger la salud de los habitantes.
Entre las acciones sugeridas se encuentran:
- Evitar actividades al aire libre durante las horas más críticas, de las 13:00 a las 19:00.
- Suspender eventos al aire libre organizados por instituciones públicas y privadas.
- Fomentar el uso de transporte colectivo, disminuir el uso de vehículos personales y, de ser posible, trabajar desde casa.
- Consultar constantemente los reportes sobre la calidad del aire en plataformas oficiales.
Asimismo, se ha puesto en marcha el programa Doble Hoy No Circula, que restringe la circulación de ciertos vehículos, entre ellos los que tienen holograma 2, holograma 1 con terminaciones específicas y aquellos que no poseen holograma de verificación.
Estas contingencias demuestran la necesidad de reforzar la cooperación entre las autoridades y la ciudadanía. Las consecuencias no se limitan a la salud pública, que incluye riesgos como enfermedades respiratorias y cardiovasculares, sino que también impactan en el equilibrio de los ecosistemas y en la dinámica económica de la región.
Para contrarrestar esta problemática a largo plazo, es fundamental invertir en energías renovables, priorizar el transporte colectivo y fomentar una mayor conciencia ambiental. Estas acciones no solo reducirán los efectos inmediatos de la contaminación, sino que contribuirán a construir un entorno más limpio y seguro para las generaciones por venir. La situación actual es un recordatorio de la importancia de proteger el aire y el entorno en el que vivimos.